Planeta Sordo
Desperté.
Las nubes carecían de ese brillo de verano, los parques vacíos nunca conocieron tal silencio. Los animales, muertos ya, se incorporaron rápidamente a la tierra, un pedazo pequeño entre tanto concreto, vidrio y acero. En aquel momento se escuchó un edificio caer a unos cuantos kilómetros de distancia, y recordé lo que mi madre me dijo hace tantos años
-Los grandes estruendos de la humanidad resuenan siempre a...
Las nubes carecían de ese brillo de verano, los parques vacíos nunca conocieron tal silencio. Los animales, muertos ya, se incorporaron rápidamente a la tierra, un pedazo pequeño entre tanto concreto, vidrio y acero. En aquel momento se escuchó un edificio caer a unos cuantos kilómetros de distancia, y recordé lo que mi madre me dijo hace tantos años
-Los grandes estruendos de la humanidad resuenan siempre a...