La Sombra De Un Sueño
Había una vez una joven llamada Ana que, en una noche de karaoke en vivo conoció a alguien, que sin saberlo sería alguien especial. Conoció a un joven llamado Carlos, cuya personalidad tierna, amable y comprensiva la cautivó. Ambos pasaron una noche hablando sin parar, y con el tiempo Ana sintió una conexión especial con él.
Inicialmente sus inseguridades y dudas sobre el amor y relaciones la hicieron autosabotearse, ella necesitaba reflexionar sobre sus deseos y preferencias en una relación, ella no le confiaría esto de inmediato. No dudaba de lo que estaba sintiendo, pero no podía comprometerse emocionalmente a fondo. Aunque le estaba doliendo, sabía que era lo correcto para su futuro no entrar en una relación cuando aún no se sentía lista. Su anterior relación había sido agotadora.
Con el paso del tiempo, Ana se dio cuenta que necesitaba encontrarse a sí misma antes de poder entregar su corazón por completo para no amar con su debilidad.
Ana tomó algunas malas decisiones para intentar olvidar a Carlos. Ella decidió alejarse de él, en un principio le propuso que sean amigos y hubo un momento donde él estaba dispuesto a corresponder su amistad, pero Ana por culpa de su miedo desperdició esa oportunidad. Pasaron varios días, ella empezaba a coquetear con otros chicos, buscando distracción, pero en sus sueños, él seguía apareciendo y atormentándola. Ana conoció a alguien que le convenía, los primeros días fueron increíbles, pero cada vez que Ana estaba por avanzar, esos sueños le recordaban lo que había perdido y la hacían dudar de su elección de dejarlo, se había quedado con ganas de conocer a Carlos más a fondo. La lucha interna entre querer avanzar y superar su relación pasada y los persistentes sueños con Carlos la mantenían en un estado de confusión y dolor emocional. Finalmente le confesó la verdad, Paulo solo se rió de Ana y le deseó suerte, ella le agradeció por el tiempo compartido y no volvieron a saber nada una del otro.
Alguien le había dicho que Carlos siguió su vida amorosa, así que no le vio sentido hablar de sus sentimientos. Esa noche bebió, como el primer día que lo conoció y se encontró a alguien muy aparente con ella, era muy agradable y enseguida le propuso que sea su novia. La verdad Ana no recuerda que dijera que sí, pero él juraba que lo había aceptado, ella no lo soportó y terminó ese...
Inicialmente sus inseguridades y dudas sobre el amor y relaciones la hicieron autosabotearse, ella necesitaba reflexionar sobre sus deseos y preferencias en una relación, ella no le confiaría esto de inmediato. No dudaba de lo que estaba sintiendo, pero no podía comprometerse emocionalmente a fondo. Aunque le estaba doliendo, sabía que era lo correcto para su futuro no entrar en una relación cuando aún no se sentía lista. Su anterior relación había sido agotadora.
Con el paso del tiempo, Ana se dio cuenta que necesitaba encontrarse a sí misma antes de poder entregar su corazón por completo para no amar con su debilidad.
Ana tomó algunas malas decisiones para intentar olvidar a Carlos. Ella decidió alejarse de él, en un principio le propuso que sean amigos y hubo un momento donde él estaba dispuesto a corresponder su amistad, pero Ana por culpa de su miedo desperdició esa oportunidad. Pasaron varios días, ella empezaba a coquetear con otros chicos, buscando distracción, pero en sus sueños, él seguía apareciendo y atormentándola. Ana conoció a alguien que le convenía, los primeros días fueron increíbles, pero cada vez que Ana estaba por avanzar, esos sueños le recordaban lo que había perdido y la hacían dudar de su elección de dejarlo, se había quedado con ganas de conocer a Carlos más a fondo. La lucha interna entre querer avanzar y superar su relación pasada y los persistentes sueños con Carlos la mantenían en un estado de confusión y dolor emocional. Finalmente le confesó la verdad, Paulo solo se rió de Ana y le deseó suerte, ella le agradeció por el tiempo compartido y no volvieron a saber nada una del otro.
Alguien le había dicho que Carlos siguió su vida amorosa, así que no le vio sentido hablar de sus sentimientos. Esa noche bebió, como el primer día que lo conoció y se encontró a alguien muy aparente con ella, era muy agradable y enseguida le propuso que sea su novia. La verdad Ana no recuerda que dijera que sí, pero él juraba que lo había aceptado, ella no lo soportó y terminó ese...