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"El Chico Maldito"
Justin era un joven de diecisiete años, conocido por su inteligencia y corazón bondadoso. Sin embargo, llevaba consigo una carga pesada: sus miedos lo seguían como sombras en la noche. Desde pequeño, había descubierto que tenía un don extraño; podía ver cosas que otros no podían. Sombras oscuras que danzaban a su alrededor, figuras etéreas de personas que habían partido, y a veces, incluso caras conocidas en el más allá. Aunque algunas de estas apariciones solo buscaban su ayuda, otras parecían tener intenciones siniestras.
La vida de Justin era un constante tira y afloja entre la realidad y lo desconocido. A menudo se encontraba atrapado en su propia mente, luchando contra sus temores, mientras las visiones lo atormentaban. En la escuela, sus compañeros lo consideraban extraño; sus ojos, siempre llenos de una tristeza inexplicable, no pasaban desapercibidos. Se sentía como un paria en un mundo lleno de risas, y su corazón anhelaba conexión.
Todo cambió el día que conoció a Sofía. Ella era todo lo contrario a él: llena de luz y energía, con una risa contagiosa que iluminaba cualquier habitación. Desde el primer momento en que cruzaron miradas en la biblioteca del colegio, Justin sintió un destello de esperanza. Sofía era hermosa e inteligente, con una sabiduría que parecía provenir de otra dimensión. Pero había algo más: ella también poseía un don especial; podía ver destellos de luz y ángeles que la rodeaban.
Sofía se acercó a Justin con curiosidad genuina. "¿Por qué siempre pareces tan triste?", le preguntó un día mientras él leía un libro sobre fantasmas. Justin dudó al principio, pero algo en la pureza de su mirada le dio valor para abrirse. Le habló de sus visiones, de las sombras que lo acosaban y de los espíritus que buscaban su ayuda.
A medida que pasaban los días, la conexión entre ellos creció. Sofía se convirtió en el faro que iluminaba la oscuridad en la vida de Justin. Juntos exploraron el mundo sobrenatural; ella le enseñó a ver la belleza en las almas perdidas y a encontrar paz en medio del caos. Con cada encuentro, Justin se sentía más fuerte y menos asustado.
Sin embargo, no todo era perfecto. Las sombras que antes parecían solo una molestia comenzaron a intensificarse. Una figura oscura comenzó a acecharlo más frecuentemente: un espíritu maligno que había estado buscando venganza por un antiguo rencor. Este ser estaba decidido a destruir cualquier chispa de luz que pudiera haber en la vida de Justin.
Una noche, mientras caminaban por el parque bajo la luz de la luna llena, el espíritu apareció ante ellos con una risa escalofriante. "¿Crees que puedes salvarlo?" dijo con voz temblorosa pero cargada de odio. "Él es mío." Justin sintió cómo su corazón se aceleraba; el miedo lo envolvió como una serpiente constrictora.
Sofía tomó su mano con firmeza. "No tienes poder sobre nosotros," declaró con valentía. Su luz brilló intensamente mientras los ángeles comenzaban a rodearlos, formando un escudo protector alrededor de ellos. Pero el espíritu maligno no se detuvo; lanzó una oleada oscura hacia Sofía.
En ese momento crítico, Justin comprendió algo profundo: su amor por Sofía le daba fuerza. Enfrentando sus miedos más oscuros, concentró toda su energía en ella y comenzó a visualizarla rodeada por luces brillantes. A medida que lo hacía, las sombras comenzaron a retroceder; podía sentir cómo el poder del amor puro desterraba las tinieblas.
Con un grito desgarrador, el espíritu maligno se desvaneció ante la luz combinada del amor y el coraje de Justin y Sofía. La calma volvió al parque; los ángeles se dispersaron lentamente mientras Sofía sonreía con lágrimas en los ojos.
"Lo hiciste," dijo ella suavemente, abrazándolo con fuerza. "Tu luz es más poderosa de lo que imaginas."
Desde aquel día, Justin ya no fue conocido como el chico maldito; se convirtió en alguien nuevo: un chico lleno de esperanza y amor. Aunque las sombras seguían existiendo en su vida, ahora sabía cómo enfrentarlas junto a Sofía, quien siempre estaría allí para iluminar su camino.
Así comenzó una nueva etapa para ambos: juntos enfrentarían los desafíos del mundo sobrenatural y explorarían el vasto océano del amor verdadero; porque incluso en las profundidades del terror y la oscuridad, siempre hay espacio para la luz.
Y así quedó grabado en sus corazones: el amor puede ser el mejor escudo contra cualquier maldad del mundo... o más allá.🤍🖤
Fin✍️
© All Rights Reserved to Elean Hdez
La vida de Justin era un constante tira y afloja entre la realidad y lo desconocido. A menudo se encontraba atrapado en su propia mente, luchando contra sus temores, mientras las visiones lo atormentaban. En la escuela, sus compañeros lo consideraban extraño; sus ojos, siempre llenos de una tristeza inexplicable, no pasaban desapercibidos. Se sentía como un paria en un mundo lleno de risas, y su corazón anhelaba conexión.
Todo cambió el día que conoció a Sofía. Ella era todo lo contrario a él: llena de luz y energía, con una risa contagiosa que iluminaba cualquier habitación. Desde el primer momento en que cruzaron miradas en la biblioteca del colegio, Justin sintió un destello de esperanza. Sofía era hermosa e inteligente, con una sabiduría que parecía provenir de otra dimensión. Pero había algo más: ella también poseía un don especial; podía ver destellos de luz y ángeles que la rodeaban.
Sofía se acercó a Justin con curiosidad genuina. "¿Por qué siempre pareces tan triste?", le preguntó un día mientras él leía un libro sobre fantasmas. Justin dudó al principio, pero algo en la pureza de su mirada le dio valor para abrirse. Le habló de sus visiones, de las sombras que lo acosaban y de los espíritus que buscaban su ayuda.
A medida que pasaban los días, la conexión entre ellos creció. Sofía se convirtió en el faro que iluminaba la oscuridad en la vida de Justin. Juntos exploraron el mundo sobrenatural; ella le enseñó a ver la belleza en las almas perdidas y a encontrar paz en medio del caos. Con cada encuentro, Justin se sentía más fuerte y menos asustado.
Sin embargo, no todo era perfecto. Las sombras que antes parecían solo una molestia comenzaron a intensificarse. Una figura oscura comenzó a acecharlo más frecuentemente: un espíritu maligno que había estado buscando venganza por un antiguo rencor. Este ser estaba decidido a destruir cualquier chispa de luz que pudiera haber en la vida de Justin.
Una noche, mientras caminaban por el parque bajo la luz de la luna llena, el espíritu apareció ante ellos con una risa escalofriante. "¿Crees que puedes salvarlo?" dijo con voz temblorosa pero cargada de odio. "Él es mío." Justin sintió cómo su corazón se aceleraba; el miedo lo envolvió como una serpiente constrictora.
Sofía tomó su mano con firmeza. "No tienes poder sobre nosotros," declaró con valentía. Su luz brilló intensamente mientras los ángeles comenzaban a rodearlos, formando un escudo protector alrededor de ellos. Pero el espíritu maligno no se detuvo; lanzó una oleada oscura hacia Sofía.
En ese momento crítico, Justin comprendió algo profundo: su amor por Sofía le daba fuerza. Enfrentando sus miedos más oscuros, concentró toda su energía en ella y comenzó a visualizarla rodeada por luces brillantes. A medida que lo hacía, las sombras comenzaron a retroceder; podía sentir cómo el poder del amor puro desterraba las tinieblas.
Con un grito desgarrador, el espíritu maligno se desvaneció ante la luz combinada del amor y el coraje de Justin y Sofía. La calma volvió al parque; los ángeles se dispersaron lentamente mientras Sofía sonreía con lágrimas en los ojos.
"Lo hiciste," dijo ella suavemente, abrazándolo con fuerza. "Tu luz es más poderosa de lo que imaginas."
Desde aquel día, Justin ya no fue conocido como el chico maldito; se convirtió en alguien nuevo: un chico lleno de esperanza y amor. Aunque las sombras seguían existiendo en su vida, ahora sabía cómo enfrentarlas junto a Sofía, quien siempre estaría allí para iluminar su camino.
Así comenzó una nueva etapa para ambos: juntos enfrentarían los desafíos del mundo sobrenatural y explorarían el vasto océano del amor verdadero; porque incluso en las profundidades del terror y la oscuridad, siempre hay espacio para la luz.
Y así quedó grabado en sus corazones: el amor puede ser el mejor escudo contra cualquier maldad del mundo... o más allá.🤍🖤
Fin✍️
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