La ciudad de Ravenswood siempre había sido tranquila, un lugar donde los secretos se escondían en las sombras. Pero en una fría noche de otoño, el cuerpo de una joven fue encontrado en un callejón oscuro. Chris Tale, un detective conocido por su inteligencia y habilidades físicas, recibió el caso. Con su altura imponente y su mirada penetrante, Chris se adentró en la escena del crimen, su mente trabajando a mil por hora.

Mientras examinaba el lugar, notó algo peculiar: un pequeño objeto brillante entre los escombros. Era un colgante con un símbolo extraño. Sin saberlo, este sería el primer indicio de una serie de crímenes que cambiarían su vida para siempre.

La investigación avanzaba lentamente y las pistas eran escasas. Chris decidió interrogar a los amigos de la víctima. Durante sus indagaciones, conoció a Mae, una psicóloga forense que estaba trabajando con la familia de la chica. Mae era atractiva y poseía una inteligencia aguda que complementaba la de Chris. Juntos comenzaron a analizar el perfil del asesino.

Mae sugirió que el asesino podría estar buscando algo más que solo matar; quizás había un motivo personal detrás de los crímenes. La atracción entre ellos creció mientras trabajaban codo a codo. Chris se dio cuenta de que no solo estaba lidiando con un caso complicado, sino también con sus propios sentimientos hacia Mae.

La tranquilidad no duró mucho. Una semana después del primer asesinato, otro...