—Son las tres de la mañana.
Caminaba hasta el muro que separa nuestro pueblo con el otro pueblo y me acerco a ver.
—Según yo tú no deberías de estar aquí a esta hora–Dice mientras suspira notablemente cansado.
Era el chico que si no me equivoco es nuevo en nuestra escuela, GENIAL desconocidos en tu escuela y en tu lugar especial, muy genial eso.
—¿Y que te hace pensar que tú también deberías de estar aquí?–Digo desafiandolo.
—Bueno déjame te digo las razones del por que no deberías de estar aquí, uno; por lo que veo no tienes el permiso de ninguno de tus padres. Dos; te puedes resfriar descubierta y solo con una pijama. Tres; tienes escuela mañana temprano y cuatro; son las tres de la mañana–Dice mientras saca un cigarro de su bolsillo y un encendedor, lo prende y se lo lleva a las boca.
—Si no te das cuenta los dos tenemos escuela...