...

1 views

La pequeña caja de oro.
Mi corazón iba a mil, las manos me sudaban y, sabes la razón? pues yo te la diré, simplemente porque sí. El bar estaba lleno, escuchaba a unos jóvenes hablar sobre una muchacha rubia que, al parecer, era la más bella que habían visto, los hombres a mi izquierda, borrachos, cantaban una vieja canción de la época y la mujer de mi derecha discutía con el marido sobre a quién visitarían en vacaciones, a los padres de él o a los de ella....