Borro y escribo
escribo y borro
Soy y no soy
inhalo, exalo
muero, vivo
te veo, parpadeo
enmudezco...

Es casi como si se tratase de un temor al vacío del papel,
a la inexistencia, al lo incoloro o quizá es un tema de no poder mirarte perenne.
¿alguien alguna vez pensó en eso que se presenta inumerables veces con brisas fúnebres al cerrar todo aquello que debe cerrarse para dar paso a la apertura de la conciencia?

Son palabras breves las que participan de esto, es el arché:

A medidas que uno y dos, y dos y tres forman tu esencia.
A medida que creces en potencia
hasta llegar a mis ojos y completarme
dejas las vivencias para morir luego en mi inconsciencia.

Y te juro que pintarte en el lienzo de la memoria, pero no en mi condición de inmanencia sino en la trascendencia, sería mi orgulloso logro prometeico.
Que cada no ser visualice tu forma, diosa mía, y que cada manifestación tuya sea fruto de mi inexistencia
Para yo ser contigo sin diferencias.


Antonio Adames.