Las flores son bellas, radiantes, únicas.

Cada una es especial, y tienen su momento del año para brillar.

Abren sus coloridos pétalos para recibir los dorados rayos de sol.

La belleza de las flores es tal, que hacemos todo para mantenerlas con vida, aunque también por sus significados, que nos hacen querer cuidarlas cada día.

Son frágiles y delicadas, hay que tener cuidado al tomarlas.

Sus fragancias cautivan a cualquiera, no se escapan ni las abejas.

Y yo, yo te dedico las flores. Cada flor que veas florece por y para ti.

Serás su sol, así como eres el mío, y a cambio abrirán sus pétalos para que admires su belleza oculta sin espera.

Te las dedico, porque así como las amo a ellas, te amo a vos. Así como con paciencia espere a que florezcan, espere a ver tu belleza.

Te las dedico, para que cada vez que veas una flor, pienses en que le hablé yo. Yo les pedí que se muestren para vos, y que se entreguen a ti como lo hago yo.

Para que te llenen de color, así como a mi aburrida vida le agregaste sabor.

Con amor, ellas son demostración de mi emoción. Al estar con vos, me siento como una flor, vos siendo mi sol.

Te quiero cuidar como a una flor, te querré de cualquier color. Cerrada, marchita o floreciendo, yo te admiraré, en cada fase que estés te acompañaré.

Cuando veas una flor, quiero que te acuerdes de mi, de como le pedí, que floreciera para ti.


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