Y si me preguntan
Y si me preguntan en alguna ocasión ¿Quién es ella? Habré de responder con una obra entera de palabras y se quedará corta mi explicación, aún siendo veraz y objetivo tendré que recurrir a la fantasía más fantasiosa para demostrar que es incomparable e irremediablemente irremplazable en el sentido literal del todo, ella no es medida con aritmética ni con física experimental, pues no se puede razonar ante tal belleza creada por el infinito azar y si quieres creer puedes hacer ver qué la mano que lo creó todo está detrás de su imperfecta perfección, porqué ante los ojos de un corazón entregado en papel y ser completo es simplemente extraordinaria, fuera de la tridimensional realidad están sus ojos, sus manos, su pelo y su piel, fuera del espacio abierto se encuentra su ser entero, ya que, al hablar de ella primero tienes que ser un ser cuyo discernimiento alcance las lumbreras celestes y a tal grado te hará falta comprensión para explicar porque razón se llega al infinito siendo aún tan finitos.
Y si me imagino un lenguaje inexistente para poder hacer de esta obra algo relevante, ha de ser más brillante mi mente que los diamantes en bruto y que los autos de fuego que brillaron en lo oculto de la antigüedad, porque su existencia misma está cifrada de extremo a extremo y aún hablar de extremos en su infinidad es una causalidad de irrealidad discutible, así que me limitaré a decir que ella está en la afortunada línea del tiempo donde transcurren los eventos que forman mi realidad y que su humanidad es luz corpórea que regaló el Eterno al mortal más feliz de la actualidad, al que le ve y solo puede decir, es una hermosa melodía que anhelo descubrir y que me hace volar al infinito y más allá.
Ezequiel Rizo
© All Rights Reserved
Y si me imagino un lenguaje inexistente para poder hacer de esta obra algo relevante, ha de ser más brillante mi mente que los diamantes en bruto y que los autos de fuego que brillaron en lo oculto de la antigüedad, porque su existencia misma está cifrada de extremo a extremo y aún hablar de extremos en su infinidad es una causalidad de irrealidad discutible, así que me limitaré a decir que ella está en la afortunada línea del tiempo donde transcurren los eventos que forman mi realidad y que su humanidad es luz corpórea que regaló el Eterno al mortal más feliz de la actualidad, al que le ve y solo puede decir, es una hermosa melodía que anhelo descubrir y que me hace volar al infinito y más allá.
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