Edén.
Bienvenido al jardín del edén; aquí lo que está mal es lo que está bien... Aquí te desnudan y te rasgan la piel, se comen tus viseras con una copa de vino y un tarro de miel.
Te vi en el cielo al atardecer y con tu gracia perfecta me deslumbré... Te quitaré las alas, y en mi espalda las pondré, no es que quiera volar, es solo que quiero verte caer.
Y con tu caída encontraré mi paz, pues en tu cárcel nace mi libertad y en tus lágrimas la más cruda felicidad.
De tus sombras...
Te vi en el cielo al atardecer y con tu gracia perfecta me deslumbré... Te quitaré las alas, y en mi espalda las pondré, no es que quiera volar, es solo que quiero verte caer.
Y con tu caída encontraré mi paz, pues en tu cárcel nace mi libertad y en tus lágrimas la más cruda felicidad.
De tus sombras...