Inhalo...
Te extraño.
Exhalo...
Te vas alejando.
Contemplo el cielo
de tumultos estrellados
que señalan el sendero marcado.
Observo el suelo
donde yacen los sueños y anhelos
allí sepultados.

Ser un guerrero del amor
sin escudo contra las flechas de la pasión,
atraviesan mis penas, las dichas y el color,
mientras cabalgo a todo fulgor,
por el florido y espinoso sendero
conocido como amor.

En esta eterna condena
de enseñanzas por tales escenas,
crepita mi pecho ardiente
mientras doy media vuelta,
los ojos se hacen fuente,
y se me hinchan las venas
por supurar, a travez de mi lengua
un susurro doliente que el viento lleva
y espero con todas ansias
que llegue al oriente de tus laderas,
el cual dice...
"Jamás te olvidaré,
en este entintado anhelo,
sigue creciendo
hermosa mujer."

Sin importar lo que suceda;
si la mar me destierra
o la tierra me encadena;
firme estaré.
Reconstruyendo mis alas,
martillando mi barca;
firme estaré.
Forjando el fertilizante más gratificante
gracias a está bella aventura
por tu clarísima luz pura
la cual jamás anochece
y por esos excelsos rayos resplandecientes
este jardín siempre estará verde.

Transitare por bosques y espesuras
tratando de encontrarme
entre llanuras y culturas.
Surcare por montes y riberas;
caminaré entre flores,
no me dominarán las fieras
e iré cubriendo con mis alas
fuertes y fronteras.

En este entintado recuerdo
indeleble en el tiempo,
escrito en un barco de papel
mecido por el viento,
tu existencia trae a mi presente
vividos momentos,
magníficando el horizonte
cubierto de letreados arreboles
que sinceran mis luceros
y me regalan este vivido encuentro,
entre tu recuerdo y mi eterno
agradecimiento a los cielos.



© ~Cris - Tian~