Pude caminar sobre la luna de su mirada,
éramos todo en una tarde asoleada,
fuimos una misma persona entre la gente.

cada poema que escribía,
cada carta de amor,
solamente tengo que sentir que estar cerca,
porque al final fui yo quien perdió,

cada melodía me recuerda a ti,
aún los cantos de las aves,
solamnete tengo que sentir mis miedos,
porque al final fui yo quien fallo.

no tengo que correr tan lejos,
las puertas de la ciudad están abiertas,
las esquinas están solas,
mirando al otro lado de mi corazón,
mirando aquel callejón donde todo sucedió.

digo que no duele,
eso duele aún más,
quiero acabar,
pero no quiero olvidar,
al final de todo fui yo quien te hizo sentir mal.

escribo para no llorar,
pensando en cada momento,
momentos que nunca volveré.


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