SOL NACIENTE

Este rutilante sol naciente,
corre y se extiende divertido.
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Entre riberas que siguen secretas montañas.
Tan inmensas como desoladas.
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Donde se sorprenden andantes caminos.
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Que de algún modo ironico.
se siguen perdiendo,
en la imprecisa distancia.
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Mientras se van dibujando estelares sombras.
Sobre la quietud del predominante campo.
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Que también anhela diluviado rocio, con transparencia de alba.
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Entre incitadores sueños cercanos, con coloridas esperanzas.
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Vastos prados han vencido,
el calor que los abraza.
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Solemnes sombras se han marchado.
De la oscuridad con el alba.
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Mientras aquí, se ennoblecen, fecundas prontas ilusiones.
que alumbran esperanza.
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Junto al confidente hechizo,
que trae profusa calma.
Impregnado de auras.
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Cada vez que la vida aferra su indomable huella.
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En la resurgida tierra,
que resiste y suda confianza.
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Sopla magia repentina,
sobre montes silenciosos.
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Como reteniendo ansiosos clamores.
Contra el asolado horizonte.
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Que emerge solitario,
Como descalzo de emociones
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Que no entienden del dolor.
Que detrás de la muda sombra.
Siempre se queda !
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Mientras conturbada la mirada marchita.
Soslaya la sombría delgadez,
de un intrincado cansancio.
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Que predice un menguado encanto,
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Como haciendo vacilante también, su suscitable existencia.
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Donde se doblega ahí !
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La impaciencia subyacente,
del desgastado hastio.
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Cuando languidece también,
el semblante campestre
de la pradera.
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Mientras rehuye de las horas intensas.
Que calladas suplican por alivio !
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Entre marchitos atardeceres.
Que adormecen el ardiente rendido follaje.
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Revive otra ligera ilusión,
que atrapa intensa fascinación.
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Cuando mirando casi perpleja
la aridez de los montes.
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Encuentro extendidas noches,
que ocultan el prolongado vuelo del verano.
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Donde sopla todavía,
divagante agonia.
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Que se va confundida,
de la retraída tarde.
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Donde Pronto abraza aliciente entereza.
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Que arraiga impasible ímpetu, sobre el ardiente paisaje.
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Como recordando otoños fecundos.
Que hacen que el corazón se vuelva inquietante.


Autor....Consuelo Sanchez