Aliento oscuro
Cuando menos la espero,
su velo oscuro sopla
mis ojos acompasados,
y su punta de ciprés.
Era un aire desgarrador,
sopesando el timbre,
atinado al corazón enfermo.
Pensé que era un ángel,
tiñendo mi sueño,
como un dorado laurel,
susurrando sus rezos.
Luego la muerte rasguñó mi puerta.
Abrí las ventanas para que...
su velo oscuro sopla
mis ojos acompasados,
y su punta de ciprés.
Era un aire desgarrador,
sopesando el timbre,
atinado al corazón enfermo.
Pensé que era un ángel,
tiñendo mi sueño,
como un dorado laurel,
susurrando sus rezos.
Luego la muerte rasguñó mi puerta.
Abrí las ventanas para que...