Te recuerdo en las sombras, de los abisales sueños de mi espíritu corrupto,
Por el céfiro álgido que inunda delegando el control de mis pies hacia mi tumba;
Y recuerdo tu aura impasible entre la lluvia garza que golpea afilada por el viento,
Y los contornos delicados, de tu bella silueta que aun recuerdo como mía…

Te recuerdo en las noches, de tonos negros azulados que ornamentan la memoria,
Viendo el majestuoso resplandor, de la caras que dibujan los astros con sus luces;
Y recuerdo tu último aliento entre esos tonos, negros azulados que ornamentan la memoria,
Y una última caricia de tu rostro, aun rosáceo, aun sonriente, aun placido y noble…

Te recuerdo en las lagunas gálicas, que dan un aire gótico espectral en los abismos,
Abismos que seducen mis temores, abismos que hipnotizan los restos de mi cuerpo;
Y recuerdo tu último baile, en la orilla de aquella laguna gálica, de aire gótico espectral,
Aquel baile suicida en el lago y el abismo, que seduce mis temores e hipnotiza mis cenizas…

Recuerdo la ultima sonrisa, que diste hacia la aurora violeta de los cielos polares
Recuerdo la última lagrima, que diste hacia el retrato antiguo de tus vidas pasadas
Recuerdo la ultima plegaria, que diste a una deidad inerte y plomiza de piedra
Recuerdo la nada, que será eterna, que será en un instante, que será para siempre…

Recuerdo tu cuerpo blanco, genésico y desnudo, que baña el Ganges con su sangre
Entre aroma de rosas y aceites de amatista, entre el sollozante canto de un fantasma
Que recuerda lo que era, que recuerda lo que fue, que recuerda la soga entre su cuello
Que recuerda la alborada quemando su recuerdo en un dantesco y agónico final….

Ooz.