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// Divergencia //
Te veo tan divergente hoy como nunca, los frágiles ligamentos subterráneos que engrosan cada cabello tuyo, son solo pequeños y ondulados desprendimientos ecuánimes victimas de la gravedad.
La postura correlativa de tu cintura enerva tus poros fríos y estos la rodean de un blanco color menta que se abraza a tu mágica y casi circunferencia figura. Más y todavía más, el verde de tus labios acapara todo el sistema planetario, que encadena sus uñas al polvo cósmico y enardece al mismo tiempo sus yemas, ayudando a tu naturaleza a procrear espacios inimaginados que transpiran inequilibrio desde tu corazón hasta llegar a tus muñecas.
Tus piernas pisan la tierra para estar seguros de sus siguientes pasos que con tus huellas entran todas en un contacto estelar sobre tus rodillas que giran 360 sobre sus rótulas y transforman los caminos en puentes hacia la estratósfera de mi alma que abierta rebalsa su jugo por sobre toda tu faringe y relativamente toma el color y sonido de un tambor que renace y alimenta al mundo de tu voz. Divergente como nunca.
© All Rights Reserved
La postura correlativa de tu cintura enerva tus poros fríos y estos la rodean de un blanco color menta que se abraza a tu mágica y casi circunferencia figura. Más y todavía más, el verde de tus labios acapara todo el sistema planetario, que encadena sus uñas al polvo cósmico y enardece al mismo tiempo sus yemas, ayudando a tu naturaleza a procrear espacios inimaginados que transpiran inequilibrio desde tu corazón hasta llegar a tus muñecas.
Tus piernas pisan la tierra para estar seguros de sus siguientes pasos que con tus huellas entran todas en un contacto estelar sobre tus rodillas que giran 360 sobre sus rótulas y transforman los caminos en puentes hacia la estratósfera de mi alma que abierta rebalsa su jugo por sobre toda tu faringe y relativamente toma el color y sonido de un tambor que renace y alimenta al mundo de tu voz. Divergente como nunca.
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