En lo más profundo de mi ser, amor guardado,
ardiente llama arde y martiriza mi pecho.
En sueños y desvelos, por ti encadenado,
mi alma late, en tus brazos sería perfecto.

Pero cruel destino, mi amor no es correspondido,
las alas de tus sueños no alcanzan las mías.
Mi corazón se ahoga, en intentos caído,
en vano suspiro por tus dulces y tiernas caricias.

Es tu mirada, daga afilada en mi alma,
que penetra mis pensamientos sin pedir permiso.
Controlas mi mente, cómo en una triste trama,
y sin poder escapar, me hundo en el abismo.

Las noches son eternas, sin tu cálido rostro,
mi mundo se oscurece, desvaneciéndose en sombras.
La desesperanza crece, mi corazón sollozo,
por no poder llegar a ti, cruzar todas las alfombras.

Mas de nada sirve, pues no puedo corresponder,
a ese amor que me consumes y me vuelve débil.
Soy prisionero de tus ojos, sin poder comprender,
por qué me atrapas en un amor tan imposible.

En cada latido, siento tu presencia asfixiante,
me arrastras lentamente hacia tu abismo sin fin.
Tu control sobre mí, es despiadado y deslumbrante,
mi razón nublada, tu figura es mi máximo festín.

Y así, entre suspiros, hechizado por tu esencia,
me rindo a la agonía de no poder tenerte.
Mi mirada vacía, sin esperanza ni paciencia,
solo puedo soñar con el amor que no puedo sostener.

En el eco del silencio, susurran mis lamentos,
por el anhelo desesperado que me consume.
Eres mi mayor deseo, mi amor confinado en cimientos,
aunque sea en la distancia, siempre serás mi legado insume.

(el más largo que he escrito...)
© All Rights Reserved