Retrato
Es viejo ya pero sigue preso de las pasiones impetuosas de su juventud, es él mismo la paradoja de querer más cuando el cuerpo puede cada vez menos. Gusta de llenarse la porra de marihuana y andar culiando con jovencitas igual de marihuaneras a él , a las que sigue con su mirada y su lengua libidinosa, y a las que al no tener plata, les puede ofrecer un porro a cambio de un rato. El trueque siempre estará vigente.
"Cuál es el afán" Dice "si con...