En mí debilidad
La fuerza no viene del cuerpo inerte, que se echa al sillón, a esperar que venga la muerte.
Nace de el alma sin edad. Se pone en pie y, pide que le den más porque, aún resiste.
No es más fuerte el que primero gane una batalla, sino, el que primero sepa reconocer que con la guerra, lo que consigue es sufrimiento.
Los débiles están hechos de hierro fundido, no se cansan de protegerse del caos, y menos aún, de salvarnos de nosotros mismos.
Lloras, ríes, sientes, sueñas y detrás escondes todo lo que tanto sufrimiento en el mundo han causado los dobles estilos, las dobles caras, las miserias y la debilidad.
Nadie quiere parecer menos fuerte que nadie. Nadie quiere ser lastimado por nadie, porque, al final, nadie se fija en mi debilidad. Nadie se percata de mis miedos, mis incertidumbres, mis complejos... ¡Así qué !.
- ¡Suficiente de plegarias! Se acabaron las súplicas, es tiempo de reconocer que la fuerza no te hace inmortal, inalcanzable, indestructible menos débil, la fuerza se traduce en simplemente en fuerza... En Lágrimas...
Nace de el alma sin edad. Se pone en pie y, pide que le den más porque, aún resiste.
No es más fuerte el que primero gane una batalla, sino, el que primero sepa reconocer que con la guerra, lo que consigue es sufrimiento.
Los débiles están hechos de hierro fundido, no se cansan de protegerse del caos, y menos aún, de salvarnos de nosotros mismos.
Lloras, ríes, sientes, sueñas y detrás escondes todo lo que tanto sufrimiento en el mundo han causado los dobles estilos, las dobles caras, las miserias y la debilidad.
Nadie quiere parecer menos fuerte que nadie. Nadie quiere ser lastimado por nadie, porque, al final, nadie se fija en mi debilidad. Nadie se percata de mis miedos, mis incertidumbres, mis complejos... ¡Así qué !.
- ¡Suficiente de plegarias! Se acabaron las súplicas, es tiempo de reconocer que la fuerza no te hace inmortal, inalcanzable, indestructible menos débil, la fuerza se traduce en simplemente en fuerza... En Lágrimas...