Amor que callas
Cabe confesar
que nunca pude con tu mundo
y la derrota se fijó en mí
desde que tus ojos, grandes y hermosos
fueron puestos por azar
en la diminuta mota de polvo
que representé en tu ostensoso cuarto.
Y me sentí débil
y me sentí triste
y me sentí solo
cuando tus ojos, titilantes como estrellas
se fueron apartando de mí,
y arrojándome con ello
a la oscuridad de la noche.
Cabe confesar
que nunca pude con tu mundo.
Que fuí limpiado,
no por tí...
que nunca pude con tu mundo
y la derrota se fijó en mí
desde que tus ojos, grandes y hermosos
fueron puestos por azar
en la diminuta mota de polvo
que representé en tu ostensoso cuarto.
Y me sentí débil
y me sentí triste
y me sentí solo
cuando tus ojos, titilantes como estrellas
se fueron apartando de mí,
y arrojándome con ello
a la oscuridad de la noche.
Cabe confesar
que nunca pude con tu mundo.
Que fuí limpiado,
no por tí...