Porque Morir, si puedo vivir;
Mirando la simplicidad de la noche,
admiraba la plenitud del horizonte del mar,
con una pena en mi corazón
me traba al respirar.
Entre el triste rencor lloraba,
dejándome llevar por la soledad que
me atormentaba.
Quizás me ahogaba y miraba el cañón
del revolver que poco a poco
me asfixiaba.
El sonido de un disparo en mi mente grababa, con tan solo el silbido en mi oído resonaba
y en ese momento me despertaba.
Cuando solo pensaba en no pensar más,
la voz de mi padre escuchaba,
dejándome un refrán y un comentario
que hasta hoy recordaba.
"Las estrellas y la luna,
son luceros que viajan, dejando
una estela al paso que deja una espada."
"Hay cosas muy bellas y hermosas en esta vida, que solo un ciego y un hombre con cáncer disfrutan, sin dejar de apreciar las caricias que deja el fin de un ocaso".
Dijo tantas cosas bellas que ahora aprecio
lo hermoso de la vida.
En cada segundo que pasa,
por el resoplar del viento mi rostro
pausaba una sonrisa...
admiraba la plenitud del horizonte del mar,
con una pena en mi corazón
me traba al respirar.
Entre el triste rencor lloraba,
dejándome llevar por la soledad que
me atormentaba.
Quizás me ahogaba y miraba el cañón
del revolver que poco a poco
me asfixiaba.
El sonido de un disparo en mi mente grababa, con tan solo el silbido en mi oído resonaba
y en ese momento me despertaba.
Cuando solo pensaba en no pensar más,
la voz de mi padre escuchaba,
dejándome un refrán y un comentario
que hasta hoy recordaba.
"Las estrellas y la luna,
son luceros que viajan, dejando
una estela al paso que deja una espada."
"Hay cosas muy bellas y hermosas en esta vida, que solo un ciego y un hombre con cáncer disfrutan, sin dejar de apreciar las caricias que deja el fin de un ocaso".
Dijo tantas cosas bellas que ahora aprecio
lo hermoso de la vida.
En cada segundo que pasa,
por el resoplar del viento mi rostro
pausaba una sonrisa...