LA LUZ DE UN MILAGRO
La vida de Sofía había sido un constante lucha contra su propio cuerpo. La obesidad la había acompañado desde la infancia, convirtiéndose en una pesada carga que la agobiaba día tras día. A sus treinta años, la enfermedad llegó sin avisar: el coronavirus. Su cuerpo, debilitado por años de sobrepeso, sucumbió rápidamente. La trasladaron a la UCI, donde la conectaron a un ventilador, luchando por cada respiro. Los médicos no tenían esperanza, su vida pendía de un hilo.
En la fría...