Maldita sea, no te metas en mi vida
Una tarde, en la que me tocó vigilar el negocio familiar, llegó uno de los amigos/clientes de mi papá y como es de costumbre se quedó conmigo a esperar que él llegase a la casa.
Cómo es de costumbre me preguntó la típica "¿te gusta la mecanica?", yo solo moví la cabeza negando.
—Uni no sabe si de que va a a vivir—insistió, cosa que también era común.
Yo al igual que con los demás me quedé callado
—Además con eso cualquier...