Lo que causo nuestro amor
SINOPSIS
Hachi Ziegler ha dedicado su vida a lamentar su soledad, sintiéndose vacía e incompleta, hasta que encontró a su otra mitad. Alegrías, tristezas y sentimientos por compartir, momentos inolvidables que quiere volver a sentir. Mientras se ahogaba en medio del caos, apareció Texi Schuster, una chica mágicamente encantadora que ve la vida de una manera muy común. Al conocerse, ambas conectaron automáticamente, como si fueran almas viejas, como si se conocieran de toda la vida.
Momentos inolvidables e insuperables juntas, riendo, sintiendo, sintiendo tan intensamente al punto de sentir asco y ardor. Felicidad y amor.
¿Pero quién dijo que puedes amar a alguien si no te amas tú misma? Quizás es posible, pero acaba de la peor manera.
PRÓLOGO
—Estoy cansada, no sé qué más hacer—, confesó mientras su mirada se perdía cada vez más.
—Tranquila, estoy aquí para ti—, dijo mientras sus ojos se posaban en los de ella.
Hachi Ziegler estaba tan rota, tan cansada de todo. La única luz en su vida era Texi Schuster, era ese rayo de sol en medio del frío incontrolable, el viento en medio del sudor imparable.
Eso que sentía, sabía que era amor. Amor, un sentimiento tan intenso y tan imperfecto. Al estar juntas, todo lo malo desaparecía.
—Gracias por todo, Texi, te amo—, dijo mirándola con unos ojos de amor inevitables, unos ojos que con tan solo mirarlos, el brillo se notaba como si se tratara de un foro de luz.
—Te amo más—, contesto, mientras se miraban mutuamente.
El amor, un sentimiento que te llena demasiado, al punto que...
Hachi Ziegler ha dedicado su vida a lamentar su soledad, sintiéndose vacía e incompleta, hasta que encontró a su otra mitad. Alegrías, tristezas y sentimientos por compartir, momentos inolvidables que quiere volver a sentir. Mientras se ahogaba en medio del caos, apareció Texi Schuster, una chica mágicamente encantadora que ve la vida de una manera muy común. Al conocerse, ambas conectaron automáticamente, como si fueran almas viejas, como si se conocieran de toda la vida.
Momentos inolvidables e insuperables juntas, riendo, sintiendo, sintiendo tan intensamente al punto de sentir asco y ardor. Felicidad y amor.
¿Pero quién dijo que puedes amar a alguien si no te amas tú misma? Quizás es posible, pero acaba de la peor manera.
PRÓLOGO
—Estoy cansada, no sé qué más hacer—, confesó mientras su mirada se perdía cada vez más.
—Tranquila, estoy aquí para ti—, dijo mientras sus ojos se posaban en los de ella.
Hachi Ziegler estaba tan rota, tan cansada de todo. La única luz en su vida era Texi Schuster, era ese rayo de sol en medio del frío incontrolable, el viento en medio del sudor imparable.
Eso que sentía, sabía que era amor. Amor, un sentimiento tan intenso y tan imperfecto. Al estar juntas, todo lo malo desaparecía.
—Gracias por todo, Texi, te amo—, dijo mirándola con unos ojos de amor inevitables, unos ojos que con tan solo mirarlos, el brillo se notaba como si se tratara de un foro de luz.
—Te amo más—, contesto, mientras se miraban mutuamente.
El amor, un sentimiento que te llena demasiado, al punto que...