Diariamente
Kristel.
Debería llamar alguien, dejar el lapiz y el papel que hay sobre mi mesa; tal véz debería irme, cojer el próximo autobús que salga fuera de esta ciudad.
No creo que pueda aguantar seguir viviendo en mi casa embrujada.
Hoy me desperté asustada, sudando y jadeando; había tenido una pesadilla. En realidad yo nunca sueño, y si lo hago son pesadillas o sueños raros que terminan dando miedo de alguna manera. Me levanté a duras penas de la cama, ya no quería sentir ese frio que llenaba mis sabanas después de haber llorado y soltado toda esa brisa de terror en ellas.
Me puse mi bata y me dirigí a la cocina, me hice unas tostadas y un poco de café. Como siempre, a las 8 de la mañana, mi casa vacía se sentía pesada.
Ya me había acostumbrado a esos ruidos matutinos, me había acostumbrados a mis fantasmales compañeros de piso, que se levantaban molestos, rabiosos, y cargados de frustración. Llevo mi vida entera viviendo en esta casa, sin ningún voto; aunque soy la única que en realidad existe, y al parecer la única que...
Debería llamar alguien, dejar el lapiz y el papel que hay sobre mi mesa; tal véz debería irme, cojer el próximo autobús que salga fuera de esta ciudad.
No creo que pueda aguantar seguir viviendo en mi casa embrujada.
Hoy me desperté asustada, sudando y jadeando; había tenido una pesadilla. En realidad yo nunca sueño, y si lo hago son pesadillas o sueños raros que terminan dando miedo de alguna manera. Me levanté a duras penas de la cama, ya no quería sentir ese frio que llenaba mis sabanas después de haber llorado y soltado toda esa brisa de terror en ellas.
Me puse mi bata y me dirigí a la cocina, me hice unas tostadas y un poco de café. Como siempre, a las 8 de la mañana, mi casa vacía se sentía pesada.
Ya me había acostumbrado a esos ruidos matutinos, me había acostumbrados a mis fantasmales compañeros de piso, que se levantaban molestos, rabiosos, y cargados de frustración. Llevo mi vida entera viviendo en esta casa, sin ningún voto; aunque soy la única que en realidad existe, y al parecer la única que...