Querido Diario II
Paso mis tiempos esperando a verte. Es así como los días de semana son especiales y los fines de semana tormentosos. Durante las clases puedo verte, ya sea personalmente, como desde las escaleras y esa es la parte más divertida: ver cómo tu le pones atención a la lapicera y vuelves la vista al profesor. Observo y contemplo tus rasgos perfectos que me maravillan siempre. No volteas nunca ni tampoco notas vivencias de miradas.
Paso las horas...
Paso las horas...