Más que nada
En largas noches solitarias,
en una casa vacía y fría,
te busco, te extraño cada día.
Creí haber visto tu sonrisa,
creí haber escuchado tu voz,
pero todo se desvaneció con la brisa.
Sigo necesitando tus abrazos,
sigo necesitando tu cercanía;
aún extraño de tus labios la poesía.
Y es que voy, por la vida vagando,
entre el día y la noche, con el
sol y la luna te sigo extrañando.
Entre canciones, entre rosas,
entre cartas y despedidas,
ahí se quedan las promesas perdidas.
Y es que ya no me quiero enamorar,
pero sigo queriendo en tus brazos
otra vez poder en paz estar.
Dame la seguridad, una pequeña
pero gran señal; di que volverás,
y que esta vez sí te enamorarás.
No te pido mucho, di que me amas,
que seremos felices…
Solo quiero eso y nada más.
© Alina Arias
en una casa vacía y fría,
te busco, te extraño cada día.
Creí haber visto tu sonrisa,
creí haber escuchado tu voz,
pero todo se desvaneció con la brisa.
Sigo necesitando tus abrazos,
sigo necesitando tu cercanía;
aún extraño de tus labios la poesía.
Y es que voy, por la vida vagando,
entre el día y la noche, con el
sol y la luna te sigo extrañando.
Entre canciones, entre rosas,
entre cartas y despedidas,
ahí se quedan las promesas perdidas.
Y es que ya no me quiero enamorar,
pero sigo queriendo en tus brazos
otra vez poder en paz estar.
Dame la seguridad, una pequeña
pero gran señal; di que volverás,
y que esta vez sí te enamorarás.
No te pido mucho, di que me amas,
que seremos felices…
Solo quiero eso y nada más.
© Alina Arias