Últimamente me he preguntado cientos de veces en que momento paso.

No esperaba este acertijo complicado, creía que querer a alguien era fácil, sencillo, lindo.

No logro recordar en qué momento te convertiste en mi mundo.

En qué momento mis sentidos disfrazados de grandes muros se fueron derrumbando y terminaron esparcidos.

En qué momento este hermoso sueño se tiño de negro y me dejo en penumbras.

Cuento los días y no hace más que darme miedo, se supone que esto ya no debería de comerme la cabeza.

Me muerdo las uñas esperando salir de esta pesadilla, pero cada que pasan las horas creo que no encontrare la salida.

Mi mente se aferra al recuerdo de los días soleados, pero mi cuerpo sabe que no resistirá más.

Si permanezco aquí me perderé y no podre regresar, ya no habrá vuelta atrás.

Peleo con el monstruo que veo en mi sueño, pero sin esperarlo vuelve a atraparme, quiere robar mi alma y encerrarme.

Quiere llevarse mis mejores recuerdos y mi alegría, ahí en el momento en que comienzo a agonizar es cuando por fin me doy cuenta que esta loca obsesión por ti, va marchitando pedazos de mi, día con día.


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