Al quebrar este maldito espejo me veo multiplicada. Por cada pedazos de vidrios, es tu amor en migajas

¡ oh reflejó del alma !
me siento encarcelada
una gota derramada en el último suspiro que mi corazón te rogaba.
Te lloré como niño que perdió su camino, en el bosque solitario dejé mi destino con rumbo a demencia pidiéndote auxilios

No sé si en mi existe cielo pero por conjurar un hechizo pido a Dios que no revele lo sucedido y perdone mi castigo de no querer soltar un amor no correspondido

Destilando sangre, me siento tan aturdida derrochando y quebrando botellas de vino
marcando tu nombre en las paredes de este nido que un día fue nuestro refugio de fuego encendido pero ahora no quedan cenizas en este congelado abismo perdido en la nada de las penumbras de mi destino

solo queda la sombra de un tonto y fracasado amor

cansada de luchar pero no quiero renunciar porque amarte sin querer ha sido mi delirio, mi tormenta y mi castigo
un amor jamás entendido

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