ABSURDO
Es común burlarse, ¿no?
Entre risas, emoción y falsa alegría, puede llenar a las personas fácilmente, más cuando creces y aprendes que hasta al más sabio, le sucede. La vida es un mar de sorpresas y caminos llenos de desafíos, al menos cuentan con finales felices, ¿verdad?
Al principio solía decirle a esa dama tan encantadora, que sería díficil que alguien intentara romperme.
–Eso es imposible–.
Cualquiera pensaría desde un punto inicial que no abarcaría desafíos de ese estilo o por lo menos, así lo pensé.
Verla llorar de tal forma que se volviera una persona demente al borde de su cama, era una sensación muy aterradora, aún más cuando empezabas a entender la situación.
–Tu padre se ha marchado–.
Asiento con una sonrisa, no pensándolo mucho; sin embargo, en lo más profundo de tus entrañas, en lo más profundo de tu mente, donde habita tu alma, se entendía.
–Lo sé–.
Esa mujer reflejaba amor en sus palabras y un dulce aroma que desprendía su cuerpo, era tan gustoso, aún lo recuerdo, sus caricias, sus palabras, sus cantos... ¡qué momentos!
Termino de empacar mis cosas para ir a la guardería y luego, marchar a casa.
Parece haberlo superado con el transcurso del tiempo, me enorgullece. Ahora brilla más que nunca.
–Te amo–, sonríe y asiente.
–Yo también–.
Aunque papá ya no esté como antes, sé que el amor no se ha ido, todo sigue su rumbo, como debe ser, como siempre fue, como será después...
Parezco cambiar, parezco verme más fornido, parezco estar más chusco, empiezo a parecerme a él.
–Mirad, ya es un hombre–.
Finalmente, llego a mi destino y es ahí donde lo más loco de mi vida empieza a surgir, nunca pensé haberte encontrado o al menos, no haberte recordado.
Sentir tal conexión que de mi boca salían palabras fluidas y con gran precisión.
"¿Qué está pasando?"
Ni yo lo sé, aunque no me disgusta.
Salimos, nos divertimos, charlamos y reímos.
No, no, no, no, no.
¡No puedo!
¡No quiero!
¿Sus ojos siempre han sido tan...
Entre risas, emoción y falsa alegría, puede llenar a las personas fácilmente, más cuando creces y aprendes que hasta al más sabio, le sucede. La vida es un mar de sorpresas y caminos llenos de desafíos, al menos cuentan con finales felices, ¿verdad?
Al principio solía decirle a esa dama tan encantadora, que sería díficil que alguien intentara romperme.
–Eso es imposible–.
Cualquiera pensaría desde un punto inicial que no abarcaría desafíos de ese estilo o por lo menos, así lo pensé.
Verla llorar de tal forma que se volviera una persona demente al borde de su cama, era una sensación muy aterradora, aún más cuando empezabas a entender la situación.
–Tu padre se ha marchado–.
Asiento con una sonrisa, no pensándolo mucho; sin embargo, en lo más profundo de tus entrañas, en lo más profundo de tu mente, donde habita tu alma, se entendía.
–Lo sé–.
Esa mujer reflejaba amor en sus palabras y un dulce aroma que desprendía su cuerpo, era tan gustoso, aún lo recuerdo, sus caricias, sus palabras, sus cantos... ¡qué momentos!
Termino de empacar mis cosas para ir a la guardería y luego, marchar a casa.
Parece haberlo superado con el transcurso del tiempo, me enorgullece. Ahora brilla más que nunca.
–Te amo–, sonríe y asiente.
–Yo también–.
Aunque papá ya no esté como antes, sé que el amor no se ha ido, todo sigue su rumbo, como debe ser, como siempre fue, como será después...
Parezco cambiar, parezco verme más fornido, parezco estar más chusco, empiezo a parecerme a él.
–Mirad, ya es un hombre–.
Finalmente, llego a mi destino y es ahí donde lo más loco de mi vida empieza a surgir, nunca pensé haberte encontrado o al menos, no haberte recordado.
Sentir tal conexión que de mi boca salían palabras fluidas y con gran precisión.
"¿Qué está pasando?"
Ni yo lo sé, aunque no me disgusta.
Salimos, nos divertimos, charlamos y reímos.
No, no, no, no, no.
¡No puedo!
¡No quiero!
¿Sus ojos siempre han sido tan...