Como abrir un libro de sueños,
Cada clic revelaba un verso escondido.
Un portal a la belleza donde tus palabras florecían.
Una primera vista, un encuentro con tus letras,
Un refugio de serenidad donde tu alma era la anfitriona.
Te descubrí, poeta oscuro y tu misterio me envolvió,
Cada poema tuyo era una caricia en mi alma,
Luego conocí tu mente y me adentré el tu laberinto
Y tras tanto recorrerlo nunca más quise salir.
Y acabe perdida en ti y tu forma de ver el mundo
Y contaba los segundos para al fin volver a hablar.
Y pasaba todo tan rápido que casi sin darme cuenta
Ya me había enamorado de alguien que no conocía.
Fueron pasando los días entre versos y palabras,
Comentarios y poemas, dos formas de ser distintas.
Pero viniste a Valencia un Domingo en la mañana
Y desde entonces tengo claro que mi vida es junto a ti.
Un paseo por ese parque entre flores y jardines,
Esa mano que agarraba con tal dulzura la mía,
Que el beso en aquella fuente ya tardaba en...