No hay salvaguarda vengadora de la justicia
no hay garantías ni promesas
ni profecías ni de futuro
alegrías;
lo injusto cabalga por la tierra
con la naturalidad de la propia hierba,
acechando en cada oscura esquina
y a plena luz del día.

Mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras y mentiras,
y odio,
¡Oro Sangre y Odio!

Mentiras de intereses forzados,
ignorancia deleznable
y un mundo tan falso coml doblegado;
mentiras que olvidan
que hacen olvidar,
mentiras que traicionan hasta a quien las diga.

Cómo acabarán los humanos organizados entre tantas mentiras,
mentiras;
mentiras de religión
mentiras de poder
mentiras de maldad y egoismo,
mentiras de derecha y desinformación,
mentiras de odio, ignorancia y terror.

¿Dónde estará el héroe salvador de esta penosa historia de incompetencia humana?,
¿dónde?,
donde los pajaros nadan su canto
en la ilusión en la nada,
nadie;
sola sociedad ante tales desesperanzas,
ególatras de latón,
ratas del privilegio,
marionetas del destino cruel
determinación desalineada
los astros hace miles de años dejaron de sonreír a la raza humana.

Mentiras y mentiras,
y si miente la propia razón,
sentimiento o emoción
se pondrán de mi santo favor;
quisiera borrar del habla a aquellos que mentiras hablan,
que saliese de nuevo por las mañanas el alba dorada,
sin bajar al nivel del enemigo
cortar todas sus extremidades púnicamente
dejarlos sin sangre azul en las venas;
masacrar los cadáveres de la estupidez
borrar el capital y toda la clase social,
organizar una armonía perfecta e inquebrantable,
y que viva la más absoluta libertad imperiosa.

Mentiras y mentiras,
cosas que nunca van a pasar,
desesperanza.

Mentiras de Oro,
mentiras de Sangre
y mentiras de Odio;
odio también siente la verdad,
odio resignado a los valores,
no postrado al lobo que devora al hombre.

© León de León