Dos pensamientos...
Pensamiento 1:
En la soledad, el anhelo envuelve,
un peso que aplasta, un silencio hiriente,
un torbellino de emociones que hiere,
el corazón grita, pero permanece ausente.
Pensamiento 2:
Ay, amigo, ¿no sientes esa carga?
Es un laberinto sin salida ni tregua,
mientras se oculta la pena que amarga,
en este sendero que a veces niega.
Pensamiento 1:
Si tan solo alguien mirara más allá,
vería las cicatrices, las sombras,
sabría que, aun en el eco de la soledad,
la herida guarda espacio para un amor que asombra.
Pensamiento 2:
Aunque esas almas rechazadas carguen...