Tomaste una decisión mientras dormías, tu locura ha hecho que pactes con aquel futuro incierto que vendría. "No tengas miedo", me decías mientras mi corazón se destrozaba por tu ausencia.
Quisiste ver el futuro y lo conseguiste; ahora que puedes, te das cuenta de que los "para siempre" no existen.
Quiero que vengas a mí para quedarte, prométeme que estarás conmigo cuando las luces se hayan apagado.
Estuviste en el día de mi nacimiento, vaya coincidencia. Tomaste a tu estrella y ahora te contemplo cada tanto, espero verte pronto, pedacito de cristal que refleja la luz de un mejor porvenir.

Mi destino es incierto y mis ganas de vivir son precarias, no sé cuántas fuerzas me queden; apresúrate y no seas fugaz como la última vez.
Quiero verte y admirar tu brillo, que te hace tan especial. No sé cuánto tiempo estaremos sin el otro por la distancia; solo espero verte y hacer de un momento la eternidad que nos vuelve fugaces.
Irradias la luz de las estrellas y llevas contigo los restos de mi supernova. Sé fiel a tu camino y supera este instante llamado vida.