Aún sigo en el hoyo, a nadie engaño,
Soy mi único apoyo, también mi regaño,
Yo sólo me arroyo, mas así asciendo peldaños,
Sólo yo comprendo este difícil embrollo
en el que me hallo,
Del mismo ya tengo muchos rasguños,
mas no huyo, aún estando a nada
del desmayo, batallo.
~
Tengo poca vida y el rumbo es oscuro
y pedregoso,
Lo más difícil es que de la depresión todavía
soy esposo,
Dudo que aquella sexy enfermera se quiera ir conmigo a la cama,
Pues creo que fácilmente se percata de que
estoy más loco que una cabra.
~
Mientras a mis ojos ella luce cual criatura
de belleza indecible,
Ella me observa como si fuese yo un extraño y peculiar espécimen,
Sin embargo entre ambos hay diferencias muy notables,
Al parecer ella ama la vida; mientras para mí
el existir es asfixiante.
~
Y quién sabe, mañana puede que me salga
de mis casillas,
De ser un bicho raro, de un siniestro puedo ser protagonista,
Más ese escenario será sólo si
mi último rastro de conciencia se eclipsa.
Mujer divina y desconocida, un deleite para mí sería tenerte en mi vida,
Estoy seguro que al disponer de tu presencia, mi gris mundo se borra enseguida.
***

– ZAFIRO /entre soledad y rubies/
nov 22,2023


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