Absolución
La credulidad
es la mortaja de los inocentes.
Yo la vestí en los ayeres
de mis incontables muertes.
Deshonrosa era la tierra,
en la que me sepulté sin cofre,
porque me apenaban los pormenores,
del amor que apagaba
uno a uno mis fulgores.
Vergüenza, y ¿De qué?.
De abrir el alma
a palabras que prometían
la bondad en la que confía
el corazón que la practica.
Vergüenza, y ¿De qué?.
De socavar mi nombre limpio
por creer en...
es la mortaja de los inocentes.
Yo la vestí en los ayeres
de mis incontables muertes.
Deshonrosa era la tierra,
en la que me sepulté sin cofre,
porque me apenaban los pormenores,
del amor que apagaba
uno a uno mis fulgores.
Vergüenza, y ¿De qué?.
De abrir el alma
a palabras que prometían
la bondad en la que confía
el corazón que la practica.
Vergüenza, y ¿De qué?.
De socavar mi nombre limpio
por creer en...