...

13 views

Vestidos de rojo
Hoy vestido,
en rojo uniforme voy,
allí donde me tienen preso.

No, no es tan malo
cómo algunos dicen.
Y sí, prefiero eso que nada.

Pero lo que, aunque trates
de ignorar,
es cierto,
es que soy cautivo.

Sí, puede que cautivo
resignado,
incluso feliz,
y conocí allí a
bellas personas que
ahora hacen camino
junto a mí.

Pero cautivo soy

Por alguna razón,
palabras como revolución
suenan huecas
dichas aquí dentro

Por alguna razón mis versos,
si dichos allí fueran,
no serían menos molestas
que la voz del profesor,
ni tampoco más escuchadas
que el crujir de los zapatos
del alumno que va al baño.

No, allí pocos entienden
de poesía.
Allí pocos escuchan la voz
que grita en su interior:
“¡Revolución!”

No, no una revolución
con armas.
Una revolución
en pos de la vida.

“¡Queremos que aquí
se enseñe vida!” - gritarían
las gentes del corazón.

“Que si no supiera que
vosotros también sufrís pensaría
que preferís morir que matar
el yugo que os coacciona

»¿Tan cobardes somos?
¿Tan dormidos estamos para ver
que ni meiosis ni mitosis sirven
para aquello que queremos?

»Tan buenos somos
en lo que no sirve y
por el camino sacrificamos
aquello que nos hacía vivos.

»Ahora se desvanecerá
si no rompemos el hielo que
cubre nuestras almas.

»¡Rezad a vuestro Dios que
yo rezaré al mío, que
en el fondo todos
queremos los mismo!

»Amar y ser amados,
dar y recibir,
compartir lo que tenemos y
experimentar lo que nos falta.

»No lucharemos.
La lucha y el amor solo
se destruyen.
Uno no puede luchar por el amor,
tan solo en contra.
Uno no puede amar al odio,
Eso iría en contra.

»Así que cuidaos
de amores que odian y
de odios que aman.

»El amor que lucha solo
lucha contra sí mismo,
y deviene odio
y miedo.”

Sin embrago, aquí seguimos,
vestidos de blanco y negro sentados,
escuchando aquellos hombres
en traje que son igualmente
infelices.

Hielo frío cubre nuestras almas
que se enfrían.
se están congelando.
Entonces, ¿te gustaría ser
fuego conmigo?

© JoMateix