III

Pienso en el manifiesto de nuestro amor,
si suspira Eolo, se que en sus corrientes lleva tu
fragancia,
Como ese ramo de jazmines que ni en las más
pestilentes aguas
se impregna de mal odor,
como ese ramo de jazmines que emana candor
aún en su tonalidad más agria.

Y antes de que ese jazmín sea desecho cutre
insertaré un gusano de seda
para que trascienda su estado a una dulce nube,
y cuando quiera estallar esa nube,
a punta de aguja hilare experiencias hilarantes,
y cuando las experiencias quieran ser un ramo de
jazmines
sabré que viven sustancialmente los primarios pilares,
y si los primarios pilares quieren ser ramos de
jazmines,
nubes dulces o experiencias hilarantes,
sabré que el principio de lo nuestro es implacable
ante la metamorfosis del azar inexorable.

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