Hace un mes, mis poemas de amor acabaron, se fueron junto a la persona que se los dedique, ahora veo que mis letras estaban sumergidas en sentimientos, que no lo tomaron con delicadez.
Me encantaría expresar algo puro del amor y verle el lado positivo a mi situación, pero mi corazón me dice que todo fue una ilusión, una ilusión que creé para proteger a esa emoción.
Mi mente era drogadicta, le encantaba la oxitocina, nunca pensé que algún día, esa droga me mataria.
Claro que estaba sumergida en una simple melancolía, pero al menos esa oxitocina me producia dopamina. Una natural hormona de felicidad, que hacía mi corazón brincar, Pero mira, ¿ quien lo diría? ¿ quién diría que me quitarían esa alegría?
pero mira, ¿ quién lo diría? ¿ quién diría que del amor ya no me expresaría?
Es cierto, puede que ahora por este choque y bloqueo no pueda decir lo mismo que decía antes, eso que el amor es puro, hermoso y tranquilo que brinda paz a los guerreros y no da lugar al olvidó.
Es difícil expresar un sentimiento melancólico, junto a una historia que yo misma cree, aunque el final no termino muy bien, no niego que no me arrepiento, Pero ¿ cuál es la razón de dañar a un corazón que solo quería amor?
Tal vez esa pregunta nunca sea contestada, y se las digan muchas mujeres en su cama, mientras cierran los ojos y hablan con la almohada, que algún día, estuvo otro aroma entre esas sábanas.
Hay tantas preguntas que desearíamos que sean contestadas, Pero muchas de ellas se callan porque irían directo al alma.
El amor es algo bonito, Pero no para mí mente, porque se sacrifica todo inconscientemente, el amor es el sentimiento más especial que existe, Pero también es el más rencoroso y despiadado que mata la filosofía de un poeta enamorado..