Si te veo, no te veo,
en la sombra te deseo,
como el aire, sin rodeo,
Un misterio que recreo.

En la mente te paseo,
Un enigma sin enredo,
como el viento que paseo,
en mi corazón te anhelo.

Tu presencia me ciega,
mas en la ausencia te encuentro,
en la bruma de mi entrega,
en silencio, te venero.

Así es el juego del deseo,
La paradoja que sostengo,
si te veo, no te veo
en mi alma, eres fuego.

© K. Álvarez Oficial