s/t
Ahora no sé si soy yo quien queda vivo en tu verso o si dejándote saber mis signos vitales te resulto oportunamente contestatario;
tampoco sé si sería mejor seguir en mis silencios y abandonar para siempre la idea de querer ser tu cauce, o reconstruir piedra sobre piedra nuestro puente.
Hay días en los que soy muy sólido, pero tanta aridez agrieta el alma y aunque me propongo ser como la lluvia...siempre caigo...