El viejo en la hierba.
Ese viejo, como no recordarlo, pasaba por el pueblo, dando sus vueltas en silencio.
Al atardecer, sentado en la hierba, contaba su historia a quien pudiera.
Cuántos consejos dio, tantas historias contó, pero por ser viejo, la gente le ignoro.
Le veían como un loco cualquiera, decían que estaba mal de la cabeza.
Ese viejo, con tantos secretos, un pasado incierto, pero daba consejos honestos.
En la misma hierba, la cual el se encargaba de cortar cada que fuese necesario.
Tanta indiferencia solo por ser un viejo, pero el quería que aprendieran, que su vida no repitieran.
Dime, ¿Que te hace diferente de aquel viejo? Si todos crecemos, envejecemos, experiencias tenemos.
¿Quién dice que no serás como ese viejo? Cuenta tus historias, aquel que escuche será afortunado, y el que no, que siga su camino y repita tu pasado.
Entonces, un día la hierba dejo de ser cortada, algo faltaba.
¿Que se perdió? ¿Que fue lo que el tiempo se llevó?
La hierba, que nunca tendrá boca para contar historias.
si tú escuchaste al viejo, serás el encargado de llevar sus experiencias en la memoria, para el, sería una honra.
© Romero